Mesas de madera rústicas

Una decoración rústica para nuestro hogar, es siempre un sinónimo de calidez y armonía muy grato, alejado de los ambientes fríos o impersonales que proponen otros estilos más modernos o minimalistas. Por eso, hoy queremos deleitar tus sentidos con estos modelos de mesas rústicas, donde, además de resistentes y muy fáciles de conservar, la madera como protagonista viene a reforzar ese aire diáfano y familiar muy agradable para nuestras estancias. Disfrútalos.

Mesa de madera expandible

Cuando observamos modelos como este, nos damos cuenta rápidamente que se puede triunfar con una mesa elegante y práctica, sin renunciar a la candidez. Apta para varios comensales, y capaz de ofrecernos mayores oportunidades de espacio al mismo tiempo, esta mesa vendrá a ser muy inspiradora para quienes buscan la comodidad y la belleza como bandera. Los asientos de vinil o sus patas resistentes y sólidas, son algunos de los aspectos que más nos han enamorado.

Mesa de madera con sillas blancas

Con ejemplos como este, es muy fácil reconocer que la madera es un elemento versátil capaz de adaptarse a cualquier composición. En este caso, el blanco refuerza un concepto de pureza muy a tono con el ambiente moderno general del salón, además de que las sillas se encargan de aportar esa pizca de naturalidad tan necesaria cuando queremos reunir a nuestras amistades o participar de una celebración familiar. Para rematar, las patas lacadas en blanco, o la superficie de madera casi virgen, completan un conjunto sin duda digno de cualquier hogar.

Mesa de madera elegante

Sus patas torneadas, sus cantos biselados o sus sillas transparentes, son tan solo el comienzo de todo lo que esta mesa tan elegante tiene para ofrecernos. A primera vista, solamente la madera lograda con tonalidades claras nos enamora por completo, pero por si acaso, también lo hace su amplio espacio, sus líneas infalibles, y ese aire general de confort y esparcimiento tan necesario para cualquier comedor. En pocas palabras, una mesa para no olvidar.

Mesa de madera con sillas metálicas

No sabemos exactamente qué nos ha seducido de esta mesa. Tal vez sea esa combinación triunfante del metal y la madera, quizás sea la mezcla de tonalidades oscuras que aportan un aire distinguido con ligeras salpicaduras de sobriedad, aunque lo más probable es que sean todas esas cosas juntas. En cualquier caso, se trata de un modelo insuperable sin dudas. Comodidad, resistencia, generosidad, y que todo ello venga desde un mismo lugar… simplemente maravilloso.

Mesa de madera tradicional

En una palabra: equilibrio. Así definimos esta mesa de madera con pinceladas en crema. Si sus líneas tan rectas evocan cierta frialdad, rápidamente las sillas al estilo sofá chester se encargan de hacerle la contrapartida, pues precisamente, en el balance de los elementos es donde este modelo logra llevarse todos los aplausos. Reforzada con una alfombra tejida y una decoración rústica muy bien lograda, no cabe duda de que estamos ante una verdadera obra de arte.

Mesa de madera con banco

Tal es la singularidad de esta mesa que, sin dejarse llevar por excentricismos, nos regala una vista realmente hermosa de todo el salón. Las primeras impresiones pueden caer en el falso error de que se trata de un modelo poco resistente, pero lo cierto es que, no sólo se ha apostado aquí por la durabilidad, sino que se ha mezclado a su vez con una clara intención de resaltar la creatividad, la confabulación de los comensales, y por supuesto, la calidez que sólo puede aportarnos la madera.

Mesa de madera espaciosa

Hay ocasiones en que lo rústico, llevado al extremo, también es capaz de funcionar. Aquí es preciso que no nos detengamos solamente en la mesa, sino que apreciemos el entorno en general y nos dejemos contagiar por ese aire campestre tan delicioso que nos proponen. Los bancos en madera virgen, la mesa alargada capaz de reunir a toda la familia al mismo instante, las sillas laterales en forma de tronco, todo está expresamente concebido para que cualquier velada se vuelva inolvidable.

Mesa de madera con patas cruzadas

Los tablones cruzados que sostienen esta mesa no son un capricho de sus diseñadores. Han sido concebidos así para relajar el ambiente, minimizar la sobriedad de los colores oscuros de esta mesa, y terminar de rematar su aspecto tan distinguido, sin duda original, pero sobre todo, muy afectuoso. Del mismo modo, las sillas tampoco renuncian a la elegancia, y su combinación de colores negro y marrón, vienen a coronar el ambiente natural de una mesa a la que, de seguro, muy pocos podrán resistirse.